
Nos íbamos de despida de soltero de uno de mis mejores amigos. Estuvimos pensando entre todos celebrarlo de varias maneras, que si cena y salir, que si un día completo en la calle tomando y comiendo, que si irnos un fin de semana de locos todos juntos. Al final nos decantamos por celebrarlo en el paintball Sevilla.
Era una de las mejores opciones teniendo en cuenta los tiempos que corren en los que no todo el mundo tiene mucha pasta para poder gastársela en una noche de juerga, aunque dada la ocasión hay que esforzarse un poco. El paintball Sevilla nos ofrecía muchas ventajas además de que a todos nos parecía una forma divertidísima de celebrar la despedida de soltero, una guerra, en mitad del campo, correr, gritar, mancharse, el plan promete.
Lo gracioso fue que una vez allí en el paintball Sevilla y en plena acción nos propusimos unos cuantos ir contra el novio. Al rato cuando los otros se dieron cuenta empezaron a seguirnos el rollo hasta que al final no había equipos, éramos todos contra el novio. EL pobre empezó a agobiarse de una manera brutal, pero lo que nos reímos fue tremendo. El pobre, se llevó cada bolazo de pintura acabo empapado y de colorines. La partida la verdad que duro un suspiro porque todos contra uno acaba en un plis, pero mereció la pene por verle la cara de estrés que tenía.
Luego cuando acabamos las partida fuimos a comer, los del paintball Sevilla tienen un bar-restaurante allí mismo, asique para no perder más tiempo ni la euforia que llevábamos de la partida seguimos allí la celebración. Como sabían que se trataba de una despedida de soltero nos lo organizaron todo bastante bien, la comida, los postres, los detalles. Tienen un buen montaje allí hecho.
Las fiestas están bien y diviertas y hay noches inolvidables, pero no siempre ocurre así, por lo que si no quieres corres riesgos ni equivocarte, en el paintball Sevilla tienes diversión asegurada y la vivencia de momentos únicos jugando con tus amigos. Estar todos una mañana o una tarde juntos en el campo y jugando, eso vale más que cualquier coctel en cualquier bar.